Kendry, la niña guerrera que lucha contra el cáncer cumplió su sueño: ver jugar al Junior
Los jóvenes de ‘Cuéntame tu sueño’ narran la experiencia con esta niña de la Zona Bananera, hasta que la barra FRBS le hizo su homenaje.
Juan Camilo García Jiménez y Laurian Puerta Ruiz
Fotos y videos de Tatiana Gómez Rueda
Especial para Zona Cero
A las 11:30 de la mañana, Kendry Benjumea, una niña de 14 años de la Zona Bananera, salió con su papá y su mamá sin saber a donde se dirigía. En la esquina de la fundación Andrea y Vanessa en Barranquilla, donde se hospeda cuando viene a la ciudad a recibir tratamientos médicos para luchar contra el cáncer, la estaba esperando una van que por dentro estaba decorada con globos. Al llegar al lugar donde se encontraba estacionado el vehículo, se abrió la puerta y se escuchó un grito de varios jóvenes de la organización Soñar Despierto que dijeron ¡Sorpresa! Kendry tímidamente pero sonriendo entró al carro, siendo recibida con abrazos por todas las personas que estaban ahí.
La van comenzó a andar y Kendry, todavía muy sorprendida, se atrevió a lanzar sus primeras palabras: “¿A dónde vamos?” Inmediatamente los voluntarios de ‘Cuéntame Tu Sueño’, programa de la Organización Soñar Despierto, le dijeron que no se preocupara, que iba a ser el mejor día de su vida y que “pasearía por toda Barranquilla”. Entre risas y con cierta timidez permaneció en el camino hasta llegar al Centro Comercial Buenavista.
Hasta el mínimo detalle fue tenido en cuenta por los voluntarios. Kendry fue llevada a un almacén de ropa femenina, donde pudo escoger las prendas que más le gustaron. Luego de elegir fue llevada a la plaza de comidas donde almorzó su menú preferido: una pechuga a la plancha acompañada de papas al vapor y ensalada. Cuando terminó de comer y para terminar de completar su felicidad, por aquello de “barriga llena, corazón contento”, los jóvenes de camiseta roja le anunciaron otra sorpresa, para la cual tendrían que vendarle los ojos. A la pequeña no le quedó otra alternativa que aceptar y depositando toda su confianza en sus “ángeles”, empezó el recorrido con los ojos cerrados.
El camino era corto pero para Kendry fue eterno. La niña, amante del fútbol y del cine, estaba desesperada por saber cuál era la sorpresa que le tenían preparada. Así, después de subir unas escaleras y caminar guiada por Steffy, Andrea, Tanya, Juliana y Riad le dieron la autorización de quitarse la venda. Kendry lo hizo sin pensarlo dos veces y cuando abrió los ojos se encontró por primera vez en una sala de cine. Su expresión cambió, la timidez ya era algo del pasado, y la sonrisa fue gigante cuando supo que la película que vería sería “El Libro de la Selva”, la cual ansiaba ver desde hace mucho tiempo.
Su felicidad era de otro mundo. Algo que para muchos es un plan común, y a veces hasta aburridor, significó para ella la felicidad de un día perfecto. La película había llegado a su fin y Kendry creía que regresaría a Andrea y Vanessa. Los voluntarios, contagiados y contagiando felicidad, le dijeron a la niña que debía volver a taparse los ojos.
En la primera conversación que tuvo Steffy, coordinadora de ‘Cuéntame Tu Sueño’ con Kendry, la niña le confesó que su pasión era jugar fútbol y que “por nada del mundo y aunque no conozco los nombres de los jugadores me pierdo un partido de Junior Tu Papá”. Fue por esto que el equipo de Cuéntame Tu Sueño se propuso llevar a Kendry a un partido de Junior, y así, luego de un recorrido un poco más largo, llegaron al estadio Metropolitano Roberto Meléndez.
Kendry fue guiada hasta la pista atlética del estadio Metropolitano y cuando le dijeron que se quitara la venda fue recibida con un abrazo del tiburón Willy, mascota oficial del Junior.
Sorprendida y muy feliz, Kendry entró a la grama donde pudo patear un balón y meter varios goles en la portería sur, tal como ella lo sueña todos los días en los que además lucha con mucha fortaleza por vencer la batalla contra un tumor. Luego empezó recorrer todo el estadio, empezando por el camerino del Junior, donde pudo sentirse como una jugadora profesional tal y como lo sueña ella.
Tras pasar por otros lugares del estadio, Kendry volvió a entrar al camerino del Junior, pero esta vez fue recibida por el capitán del equipo Sebastián Viera, quien demostró no solo ser bueno como arquero sino también como anfitrión.
El uruguayo, ejerciendo su labor de capitán, la llevó donde estaban todos los compañeros y pudo compartir con los demás jugadores tomándose fotos. Para cerrar con broche de oro, Viera pasaba una camiseta a cada integrante del equipo para que la autografiaran y al final se la regaló acompañándola con unas lindas palabras de despedida y fortaleza.
Kendry no se creía lo que estaba pasando y ya ubicada en la tribuna occidental dijo con una gran sonrisa: “Estoy muy feliz por todo lo que me han regalado”. El árbitro dio inicio al partido en el que Vladimir y Jarlan marcaron los goles que emocionaron aún más a la guerrera de 14 años.
Durante muchos momentos del primer tiempo la atención de Kendry se la llevaron los hinchas junioristas ubicados en la Tribuna Sur, a quienes miraba con una admiración inigualable. Lo que Kendry no sabía era que uno de sus “padrinos” de Soñar Despierto, confiando en la suerte, habló con uno de los barristas para que fuera su intermediario con “El Ruso”, líder del FRBS, y la recibieran en el medio tiempo.
Cuando terminó el primer tiempo la niña recibió la última sorpresa. Gabriel, mejor conocido por todos como el Ruso, líder del Frente Rojiblanco Sur, estaba esperando a Kendry para hacerle un homenaje en la famosa tribuna, donde la recibieron coreando su nombre. Una vez ubicada en medio de los instrumentos musicales, el líder de la barra le regaló una manilla y le besó la mano, invitándola a cantar y a alentar a Junior como una más de la barra, que partido tras partido acompaña al equipo.
Todo terminó de la mejor manera: Junior venció 2-1 al Cortuluá, Kendry vivió un día que como ella misma decía, “jamás lo podré olvidar”, y su mamá en medio de lágrimas agradecía a Dios y a la vida por haberle regalado este día a su hija “que le regala esperanzas en su corazón para seguir luchando”.
El momento de la despedida había llegado. Los rostros de los voluntarios de Soñar Despierto reflejaban la felicidad de haber cumplido su misión. Después de un día lleno de muchas sorpresas y alegrías, un “gracias por todo. Nos vemos pronto” quedó como despedida cuando Kendry se bajó en Andrea y Vanessa, lugar donde se hospeda mientras juega el partido más difícil de toda su vida.